En Laudio, a 18 de enero de 1018. El grupo municipal EAJ-PNV de Laudio ha vuelto a criticar la deficiente gestión que el actual equipo de gobierno mantiene. En esta ocasión, el motivo lo ha suscitado el estancamiento y falta de regularización del cobro de tasas municipales tales como el del servicio de alcantarillado o por el del servicio de recogida de basuras.

ANTECEDENTES

El pasado 26 de diciembre, el grupo municipal jeltzale exigía al equipo de gobierno explicaciones relativas al reiterado retraso -más concretamente de dos ejercicios- en el cobro de las tasas de basura y alcantarillados. La preocupación no sólo del grupo jeltzale como promotor de la pregunta, sino del resto de la oposición se incrementó al recibir la respuesta por parte de EH Bildu, que tras reconocer que eran conscientes de la falta de giro, ya se giraría, sin detallar ni cuándo ni de qué manera. Todo ello, con una despreocupación y parsimonia aplastantes, tónicas ya conocidas del actual gobierno municipal.

El propio informe de intervención del 2016 ya recogía esta anomalía y apuntaba textualmente: ¨Por otro lado no se han girado los Padrones 2016 de las Tasas de recogidas de basuras y alcantarillado por importe aproximado de 1.012.469,06.-€¨

Una cifra escandalosa, a la que se debe sumar la relativa al 2017, lo que dejaría un descubierto relativa a los ingresos por cobro de tasas de basuras y alcantarillado aproximado de algo más de 2 millones de euros.

Son ya tres -2016, 2017 y este último ejercicio de 2018- los ejercicios pendientes de cobro por parte del Ayuntamiento de Laudio. ¿La causa? La permisividad del equipo de gobierno en el sucesivo retraso del giro de dichas tasas.

Un ejemplo más del nefasto carácter recaudador y de la deficiente gestión presupuestaria de EH Bildu, que repercutirá en decisiones recaudatorias venideras y en el bolsillo de las personas contribuyentes, pero, sobre todo, en la calidad de los servicios que la ciudadanía precisa.

Y es que, mediante la regularización del giro, se garantizaría una importante inyección de dinero en las arcas municipales, para así poder acometer y agilizar obras de calado  que siguen pendientes, en detrimento de toda la ciudadanía.